¿Que Explica Las Violentas Manifestaciones De Estudiantes Y Trabajadores?

Sebastián Burr Cerda

Si uno revisa los actos de violencia que se vienen sucediendo durante el gobierno de la Concertación, podrá constatar que no tan sólo nunca han cesado, si no que han ido in crescendo y las “motivaciones” han ido en permanentemente evolución. ¿Cual es el reclamo de fondo de estudiantes y trabajadores?
Salvador Allende en el año 72, después de violentas manifestaciones de trabajadores en el “cordón Vicuña Mackenna” dijo que si los asalariados chilenos en vez de percibir 250 dólares per cápita, alcanzaban los 500 dólares, el país jamás volverían a escuchar un reclamo obrero. Desde entonces el ingreso p/cápita ha alcanzado 7000 dólares y los precios relativos de productos de consumo han caído a aproximadamente a un tercio de los precios de entonces. Ergo los US$ 7000 tienen alrededor de un 100% de mayor poder adquisitivo descontando la inflación del dólar. ¿Y las protestas terminaron? No. De manera que no es esperable que las quejas vayan a cesar si a los estudiantes y a los trabajadores se le aceptan incluso todas sus peticiones. Más vale entonces asumir las carencias que presenta el modelo liberal / socialista imperante y a buscar explicaciones que superen la dimensión económica. Nuestra clase política no puede ser tan simplista y suponer que la condición humana responde a cuestiones exclusivamente materiales y a sólo más y más regulaciones, pues el hombre rebasa por lejos esa dimensión material y requiere hacer del ejercicio de la libertad una realidad práctica y diaria.
La Europa del materialismo dialéctico de Marx cercenó las libertades, experimentó con la igualdad económica au trance durante 80 años y todos vimos como terminó el proyecto colectivista. Latinoa-mérica a su vez se encuentra en una suerte de proceso de involución carente de estructura y muchos estamos expectantes con lo que vaya a ocurrir, siendo que casi todos los gobiernos que la rigen son de corte socialista administrando un modelo liberal de mercado. ¿Entonces que es lo que se requiere?
El socialismo tiende por naturaleza a constreñir la expansión y a negar el desarrollo integral del hombre, es fuertemente regulatorio, no atiende razones que superen la perspectiva material y recargan una y otra vez la estructura tributaria no obstante el país esté nadando en dólares, pues solo cree en formulas redistributivas y no productivo / participativas, cerrando la posibilidad a que la solidaridad social se manifieste y los talentos humanos se expandan, sobretodo el de los jóvenes.
El liberalismo en cambio hace su apuesta por un desarrollo económico rápido, pero no hace mucho porque el resultado de ese crecimiento se expanda sistémica, objetiva, proporcional y económicamente a todos los participes de la economía nacional, basta conocer las tremendas desigualdades en materia de distribución del ingreso para comprender que los beneficios benefician a unos pocos y no a la mayoría. La conjunción de ambas dinámicas plantea un modelo fallido, cuyo peligro radica en que las mayorías sin racionalizar las fallas den pábulo al surgimiento de algún peligroso caudillismo político.
Los estudiantes no quieren repetir el modelo de frustración de sus padres, que no obstante la economía del país es inmejorable, no salen de los mínimos, de un endeudamiento imposible de regularizar y de una falta de expectativas crónica. El reclamo de los trabajadores y de estudiantes no es por lo que les pasa, sino por lo que no les pasa.
Chile requiere abrirse a más libertades y a una cultura de emprendimiento a nivel microeconómico. A una expansión seria y eficiente del modelo y que el protagonismo y los resultados de la economía lleguen a todos los ciudadanos que estén dispuestos a asumir un rol activo y abierto a resultados, esto bajo un manto de protección social que no inmovilice la voluntad humana pero que evite los abusos o circunstancias negativas. Hay algunas cosas en que no se debe competir y otras en las cuales es absolutamente necesario hacerlo. También se requiere una reforma educacional seria, que permita abrirse a la libertad educacional, pues a todas luces el modelo de educación estatal no está brindando los resultados que las familias, la naturaleza humana y el mundo moderno demandan.

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