Lo que explica la adhesión al Pte. Lagos

Diario El Mercurio, Lunes 21/03/2005
Sebastián Burr Cerda

A muchos sorprende que la adhesión ciudadana hacia el actual Presidente de la República alcance un inédito 76% (encuesta Ipsos). Más allá de lo favorecido que el Gobierno se ha visto por el elevadísimo precio del cobre (cuatro veces sobre su costo de explotación) y un manejo razonable de la macroeconomía, lo que realmente mantiene contento al 80% de la población (con un ingreso promedio de seis mil dólares anuales) es que tienen ingresos de país de mediano desarrollo económico, y consumen a precios de un país bajo un brutal subdesarrollo económico, laboral y social.

El 43% del consumo nacional (productos no perecibles) según el Departamento Comercial de la embajada de China (2003), proviene de ese país. El trabajador chino, que percibe 800 dólares promedio per cápita anual, trabaja 72 horas semanales contra las 45 nuestras. Tiene dos o tres días de descanso anual contra los 67 del trabajador chileno. Cero indemnización por años de servicio contra los 12 o 34 salarios en indemnización a que puede alcanzar el despido de un solo trabajador chileno. Este solo costo significa en la práctica una ley de inamovilidad en las pymes, de lo que se deviene una bajísima productividad y que los índices de cesantía no cedan.

De hecho, dicho sector, sólo en previsión adeuda 800 millones de dólares al sistema y al menos uno o dos meses de IVA e isapres. El valor del salario mínimo ha sido aumentado (por ley) en un 55% en sucesivas etapas (toda vez que el país ha enfrentado elecciones), contra un 20% de crecimiento aproximado en el mismo período.

En realidad, el Presidente les debe casi toda su adhesión a la brutal descapitalización de las pymes en favor del 80% de los trabajadores chilenos y al deshumanizado y despiadado tratamiento que le dan al trabajador asiático. ¿Qué pasó con el humanismo y la solidaridad internacional socialista?

 

 


 

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